Ya estaba olvidado mi amor fracasado
y llegaste tú,
bordando el pasado
como en un dechado de raso y tisú.
Divina sorpresa que dio a tu belleza
fragante y triunfal,
la sueva promesa de un amor que empieza
como un madrigal.
Tu piel de azucena
despertó el poema de mi soledad
y en tu frente buena, como una diadema
tembló mi ansiedad.
Tu boca preciosa
y el sueño de rosa de tu palidez
provocó impetuosa
la inquietud curiosa de amar otra vez.
y llegaste tú,
bordando el pasado
como en un dechado de raso y tisú.
Divina sorpresa que dio a tu belleza
fragante y triunfal,
la sueva promesa de un amor que empieza
como un madrigal.
Tu piel de azucena
despertó el poema de mi soledad
y en tu frente buena, como una diadema
tembló mi ansiedad.
Tu boca preciosa
y el sueño de rosa de tu palidez
provocó impetuosa
la inquietud curiosa de amar otra vez.
song info: